Cuándo la más negruna especie de mal revive debajo de los más profundos suelos y superficies terrestres, no huya. Se puede cubrir con el primer utensilio que tenga cercano.Puede gritar hasta que sus cuerdas vocales y consonantes así se lo permitan durante un dictado periodo de tiempo silencioso y longevo como la vejez misma. Pero nunca usted debe huir. Sus pupilas pueden traducirle la información a su cerebro en tinta blanca y negra;sus pupilas pueden interpretar el cielo como un escenario de cometas fogosos cayendo, pero no huya. Dele incluso una patada en las sienes.Todo es válido. Pero no huya. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario